domingo, 7 de octubre de 2012

LICUADORA


Deberías licuar. Siempre licuar.
Licuar la palabra con la cosa.
Licuar la idea con la acción.

Deberías licuar. Siempre licuar.
Licuar el sexo con el amor.
Licuar lo sublime con lo ridículo.
Licuar la torpeza con el talento.

Deberías licuar. Siempre licuar.
Así están hechas las cosas.
La espuma se hace borra.
La borra se hace espuma.
Vos licuá. Siempre licuá.

Licuá al niño con el adulto.
Licuá la risa con la tristeza.
Licuá el llanto con el gozo.

Poné una frutilla en el copo cremoso del fracaso.
Que tu equivocación sea perfecta.
Que tu perfección sea involuntaria.
Que lo más calculado sea tu espontaneidad.
Que lo más espontáneo sea tu excelencia.

Deberías licuar. Siempre licuar.
Licuar la nada con el todo.
Licuar la cobardía con el coraje.
Licuar el arte con la vida.
Licuar la vida con la muerte.
Y una vez que hayas licuado todo
deberías licuar tu licuado
con el licuado de todos los demás.


                                                   07/10/2010
                                                   Miguel R. Benitez


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