viernes, 7 de agosto de 2009

POESÍA DE MIERDA (Chica de la foto: Kate Moss. Después seguro peinó una raya y no me refiero a la raya del culo).



Me cago en tu mal fingida angustia existencial y en tus putos poemitas de amor que se repiten a sí mismos con una lógica de espejo frente a espejo. Me cago en tu patética búsqueda de un mundo mejor, en todo tu mal cogido compromiso social y en esa estúpida pose egoísta de hacerse el buenito. Me cago en la falsedad domesticada de la gente que no se hace cargo de lo que es: materia orgánica en descomposición, culitos rotos de continuas y febriles imposiciones sociales, monstruos de armario que ya no asustan a nadie. Me cago porque no hay nada más poético que cagarse, abrir bien el ojete, hacer fuerza hasta que nos lagrimeen los ojitos y seguir acumulando mierda sobre mierda sobre mierda. Me cago en dios y en medio mundo, especialmente en medio mundo porque no me gusta cagarme en fantasías infantiles de pobres pelotudos sin cerebro. Me cago a chorros salpicándote la cara porque la porquería con que nos alimenta el mundo realmente me enferma. Me cago en todos los demás tan sólo porque no puedo salir de mi culo para agacharme sumiso y cagarme en mí mismo. Me cago en todas las academias y en todas las teorías literarias porque soy un poeta de verdad y sé que la poesía termina en el preciso momento en que se la quiere explicar. Me cago en el medio de la plaza porque si algo sobra en el mundo son lugares para esconder la mierda doblemente mierda de gente que se alimenta con mierda. Me cago porque sí aunque esta falta de razones haga temblar de miedo a las psicólogas rubiecitas que no encontraron nada mejor que hacer con la platita de sus padres. Y no es que me cago por ser un cagón sino que me cago porque me animo a la caca y soy un mártir excremencial de la honestidad bruta. Me cago porque siempre que escribo, he aquí el ejemplo, termino yéndome a la mierda. Me cago en la vida porque soy el último punk y no hay nada más heavy que cagarse muriendo. Me cago porque mandando todo a la mierda siempre me fue muy bien en la vida. Me cago en tu opinión negativa porque irónicamente todo esto que escribo está muy lejos de ser una cagada. Me cago porque cagando soy feliz. ¿Alguien me puede decir dónde mierda dejaron el papel higiénico?

2 comentarios:

  1. Aquí es muy importante y sabemos que el autor estará feliz de que analicemos y expliquemos lo que intentó decir... Esto es claramente un Edipo mal curado por haber mezclado alcohol y antibióticos. Además se deja entreveer la oscura alusión a algún gallito rojo, que claramente hace referencia a algo... por lo demás la poesía nos parece una sobrecogedora mierda digna de ser reconocida y festejada. Salud!

    ResponderEliminar
  2. Miguel...

    Este poema tiene la capacidad de ser catártico tanto para vos que lo escribiste... como para quien está acá sintiendose una mierda y tiene la suerte de leerlo...

    Gracias por todo...

    No dejes de escribir... y si dejas de escribir, andate a la mierda.

    ResponderEliminar